Hoy queremos hablar sobre un nutriente fundamental que no puede faltar en nuestra alimentación, estamos hablando sobre la fibra, esta es especialmente importante para nuestro sistema digestivo, que es donde va a desempeñar las principales funciones. El consumir las cantidades necesarias redunda en muchos beneficios para la salud, por eso hoy queremos compartir consejos sobre esta para que puedas lograr excelentes resultados, ¡presta mucha atención!
Vamos a comenzar hablando sobre qué es la fibra, se trata de un hidrato de carbono que no es digerido por las enzimas digestivas, por lo que no se absorbe y pasa íntegra a lo largo del aparato digestivo. Tenemos dos grandes grupos en los que podemos dividirla: la fibra soluble e insoluble. Esta capacidad de solubilizarse o no en agua va a tener diferentes consecuencias, efectos y beneficios.
En esta primera nota hablamos sobre la fibra insoluble, la misma se consume a través de los cereales y sus derivados: pan, pastas y cereales, pero en sus variedades integrales. Como lo dice su nombre, este tipo de fibra no es capaz de solubilizarse en agua, sí que es capaz de retener ciertas cantidades de agua en su estructura, lo que hace que aumente de volumen. Algo fundamental a mencionar es que la misma no es atacada por la flora intestinal en el colon, por lo que se excreta tal cual por las heces. Estas características permiten aumentar la movilidad intestinal, sobre todo del colon, ayudando a prevenir y mitigar ciertos trastornos digestivos como el estreñimiento.
Esto era lo que teníamos para compartir, aunque no te pierdas la próxima nota en donde te damos más consejos.