Con el fin de las vacaciones volvemos a la rutina diaria y al gimnasio a quemar todas las calorías que ganamos en el verano. Es muy importante tener en cuenta determinados puntos a la hora de volver a ejercitar.
Si vamos a hacer musculación entonces es importante mantener una alimentación equilibrada, de esta forma nos será más fácil alcanzar los objetivos propuestos. Recuerda que debes consumir hidratos de carbono y grasas para tener la energía necesaria, y además, proteínas para desarrollar y mantener la masa muscular.
Por otro lado, es muy importante que si llevamos uno o dos meses sin hacer ningún tipo de ejercicio, seamos realistas y no cojamos la misma cantidad de peso que solíamos levantar. La vuelta al gimnasio debe hacerse de forma progresiva, sin excesos, o lo único que lograremos es lastimarnos.
Lo que se recomienda en estos casos es hacer ejercicios de musculación con el 50-75% de peso que levantábamos antes de las vacaciones, por lo menos durante la primera semana. Una vez pasado este período de tiempo nuestro cuerpo comenzará a adoptar la forma que solía tener.
Los calentamiento también son aspectos fundamentales, debemos seguirlos religiosamente y prolongarlos más de lo normal, de esta forma prevendremos posibles lesiones por sobrecarga.
Si al final del día sientes los músculos doloridos significa que quizás te pasaste de peso, modérate en la siguiente sesión. Si sientes solamente ligeras molestias, entonces vas bien, es normal que suceda ya que el cuerpo lleva mucho tiempo sin levantar peso y ha perdido la costumbre.
Con una buena alimentación, el levantamiento de un peso adecuado y los calentamientos previos podrás reanudar tus ejercicios regulares sin problemas.
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