La comida rápida sigue sumando evidencias acerca de sus efectos negativos sobre el organismo, ya que no sólo puede favorecer el desarrollo de obesidad, hipertensión, diabetes y enfermedades cardiovasculares, sino que ahora se sabe, puede potenciar el asma.
Comer hamburguesas y papas fritas puede agravar el asma, ya que un reciente estudio comprobó que los pacientes con asma que comieron una comida rica en grasas tuvieron una mayor inflamación en sus vías aéreas y además, no respondieron tan bien al tratamiento como aquellos que comieron una comida baja en grasas.
Se sabe que los factores climáticos influyen en el desarrollo y la sintomatología del asma, pero ahora, queda demostrado que otros factores del ambiente que son modificables, tales como la dieta, también influyen en la enfermedad.
La prevalencia de asma se ha incrementado notablemente en los últimos años en los paíss occidentales donde, justamente, se lleva una dieta rica en grasas con gran predominio de comidas rápidas como son las hamburguesas y las papas fritas.
Estudios previos ya habían demostrado que comer alimentos grasos puede estimular al sistema inmune y favorecer así, el desarrollo de procesos inflamatorios, y dado que el asma se produce por una inflamación de las vías respiratorias, pensar que la comida rápida agrava la patología no parece disparatado.
Aunque aun se requiere confirmar los datos antes dichos, siempre es recomendable para muchos aspectos de la salud, reducir el consumo de alimentos ricos en grasas tales como son las hamburguesas y papas fritas, limitándonos a ingerirlos con frecuencia semanal o más esporádico de ser posible.
Fuente: msnbc.msn.com
En BlogNutrición: La grasa abdominal eleva el riesgo de asma
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