En la dieta de los niños, la incorporación de verduras suele representar un gran problema, ya que si nunca han visto antes determinado alimento, ellos presentan resistencia a su inclusión en la dieta.
Sin embargo, además de persistencia es importante familiarizarlos con las verduras y no resistirse a la idea de que no les gusta. Todo ésto es posible, aunque no es tarea fácil para los padres.
A continuación te damos algunos trucos para que los niños coman más verdura y se beneficien de la ingesta de este tipo de alimentos, ricos en fibra, vitaminas, minerales y antioxidantes:
- Incluirlos en la cocina: permitir que los niños participen de la preparación de las comidas les ayuda a familiarizarse con las verduras y así, las posibilidades de que las consuman son superiores.
- No dejar de presentarlas: continuar elaborando verduras y comiéndolas delante de ellos, así como preguntando si desean, es una buena forma de que los niños pierdan el temor a incorporarlas.
- Comida divertida: a los niños les agrada ver platos divertidos y para ello, es bueno formar figuras con las verduras y dibujos que ellos mismos pueden preparar y que seguro, después comeran.
- Enmascaradas: otra forma de incorporar verduras es en preparaciones en donde casi no se perciben, por ejemplo, en hamburguesas, en sándwiches, en budines o por qué no, en licuados y sopas.
- Variar: presentar siempre una verdura distinta es buena idea para que los niños no se aburran de los alimentos y puedan incorporarlos con gusto.
- No obligar y fundamentar: no debemos obligar a consumir verduras, aunque si podemos insistir en que lo hagan y fundamentar por qué es importante su consumo, por ejemplo, nombrando los beneficios que gozarán con su ingesta.
Éstos son algunos de los trucos que pueden ayudar a que los niños consuman más verduras y así, disfruten de los beneficios de este grupo de alimentos en particular y cubran sus necesidades incorporando una variedad de alimentos.
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