Los partos prematuros son una condición en aumento debido al estilo de vida actual que influye, grandemente, en la gestación.
Factores como el mayor índice de masa corporal, la alimentación excesiva o deficitaria, y el sedentarismo, son causantes del incremento de partos prematuros que, a su vez, puede originar consecuencias sobre la salud del bebé recién nacido como de la madre.
Se sabe que la relación entre el estilo de vida materno y la gestación, como así también, la salud futura del niño, es fuerte y consistente, por lo que, para reducir el riesgo de parto prematuro se debe seguir una alimentación balanceada complementada adecuadamente con actividad física regular y apta para el embarazo.
Por supuesto, el error principal es la falta de control y asesoramiento profesional acerca del estilo de vida materno más acorde a un correcto desarrollo fetal.
Es imprescindible que las calorías dietarias no sean deficitarias ni excesivas, para alcanzar así, un adecuado incremento de peso durante la gestación que propicie la salud de ambos cuerpos involucrados: el de la madre y el del bebé.
Ser excesivamente sedentario no sólo debilita la forma física de la mujer embarazada, sino que puede traer aparejado otros inconvenientes durante la gestación y sobre la salud del bebé en desarrollo.
Por eso, recordemos que un estilo de vida saludable redunda en beneficios en cada una de las etapas de nuestra vida y puede prevenir gran número de enfermedades y dolencias, siendo en este caso, no solamente nuestro organismo el beneficiado, sino también, la calidad de vida futura de nuestros hijos.
Fuente: sportlife.es
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