Hoy vamos a hablar un poco sobre la alimentación de los deportistas. Cuando hacemos actividad física, en especial las que consumen mucha energía y son muy intensas, incrementamos significativamente el consumo de oxigeno. Esto hace que se incremente también la producción de radicales libres, moléculas que oxidan y envejecen nuestras células.
Por tanto, podríamos pensar que, cuanto más deporte hagamos más vamos a oxidarnos. Estamos en lo correcto, sin embargo, esto no tiene que ser así necesariamente. Existen formas de prevenir la oxidación, esto puede lograrse a través de la alimentación. Ya hemos mencionado en numerables ocasiones la importancia de llevar una dieta balanceada, esto incluye a todas las personas pero especialmente en el caso de los deportistas. Estos además, deben preocuparse por consumir alimentos antioxidantes y llevar una dieta que les permita mantener su sistema inmunológico trabajando en su máxima capacidad.
Es importante aclarar que cuando decimos que el deporte nos oxida, no significa que el deporte sea mano, todo lo contrario. El deporte ayuda a retrasar el envejecimiento muscular y óseo, además nos ayuda a mantener una buena capacidad pulmonar, cardíaca y de movimiento. Lo que debemos tener en cuenta es la alimentación, que esta esté acorde a lo que hacemos.
Por otro lado, es fundamental estar bien hidratados y hacer los estiramientos y calentamiento adecuados antes de practicar cualquier deporte, además de descansar como es debido. Esto ayudará a mantener la oxidación a raya.
Por tanto, si bien el deporte aumenta los radicales libres y aumenta el riesgo de oxidación, esto puede solucionarse si cuidamos de nuestra alimentación y estilo de vida.
Los principales antioxidantes son los siguientes:
– Vitamina C, la encontramos especialmente en frutas y verduras crudas y frescas, tales como el brécol, perejil, guayaba, hinojo, coliflor, berro, pimiento, pepino, melón, papaya, fresas, coles de bruselas, todos los cítricos, los kiwis, y los tomates.
– Vitamina E, la encontramos en las semillas, en los aceites vegetales (soja, maíz y girasol), germen de trigo, vegetales verdes, frutos secos, cereales y yema de huevo.
– Betacaroteno, se encuentra en frutas y hortalizas de color rojizo, amarillo y anaranjado. Por ejemplo, zanahorias, albaricoques, espinacas, tomate, calabaza, melón y brécol. Preferiblemente deben ser ingeridas crudas o cocinadas al vapor.
Por tanto, si practicas deportes, no olvides seguir estos consejos.
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