En un mundo lleno de presiones en torno a la imagen y el peso corporal, cada vez surgen más trastornos alimentarios, asociados a diferentes conductas, hábitos o situaciones.
Desde los más comunes, como la obesidad, bulimia o anorexia, hasta los más llamativos y preocupantes como la tanorexia, ebriorexia, permarexia y ahora, la brideorexia.
La brideorexia o la noviorexia es aquella obsesión por perder peso que lleva a las mujeres a utilizar cualquier recurso para adelgazar, sin importar sus riesgos, para estar delgadas el día de su boda.
Un estudio realizado por Appetite, comprobó que el 70% de las mujeres norteamericanas que estaban comprometidas, intentaban perder 10 kilos para el gran momento de la boda.
Y si bien, el 20% de ellas quería perder peso de la manera más saludable, haciendo dietas equilibradas y ejercicio físico con regularidad, la mayor parte utilizaba métodos extremos para alcanzar su objetivo, tales como dietas líquidas, abuso de laxantes, vómitos autoinducidos, entre otros.
Entre los recursos usados por las novias afectadas por este trastorno alimenticio, figura el hecho de hacer su vestido de tallas más chicas a las que le pertenecen, con la finalidad de verse obligadas a perder kilos para poder entrar en su propio vestido.
Esta circunstancia es un momento especial en la vida de las personas, por eso, pueden marcar tu vida, y si en este momento te ves presionada por lograr una imagen de tí que no te pertenece, es muy probable que el trastorno continúe después de la boda y no te permita disfrutar de ese gran día.
Además, las acciones utilizadas para perder kilos sin importar sus riesgos, pueden alterar fuertemente el metabolismo del cuerpo y atentar contra nuestra salud futura provocando incluso, un aumento de peso.
Por ello, no olvides que el momento de la boda es para tí, y sólo debes prestarle atención a tu vida futura en estos casos, que sólo será gratificante si tu salud y la de tu familia se encuentra en condiciones. Por lo tanto, piensa en el daño que puedas causar con sólo recurrir a métodos extremos unos pocos días antes del casamiento.
Fuente: vivirsalud.com
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