Siempre se ha dicho que ante cualquier enfermedad lo último que hay que hacer es suprimir la alimentación. Sin embargo, una investigación que luego de 4 años muestra sus avances en la revista científica PNAS Early Edition afirma que el ayuno en pacientes con cáncer permitiría reducir los efectos secundarios de la quimioterapia y al mismo tiempo, aumentar las dosis de la terapia para combatir la enfermedad.
El estudio hasta el momento se realizó en ratas a las cuales se sometió a un ayuno durante dos días. El ayuno permite que las células sanas utilicen la poca energía que tienen en su supervivencia, lo cual convierte a dichas células en más resistentes ante la quimioterapia que las células cancerosas.
En los próximos 6 meses los investigadores obtendrán los resultados del ayuno sobre las células humanas, aunque ya se cree que no habrá mayores diferencias con los encontrados en roedores, ya que el comportamiento de las células sanas y cancerosas es muy similar.
No obstante, el mayor grado de complejidad del cuerpo humano puede reducir el nivel de protección del ayuno frente a la quimioterapia, indicó Longo, biólogo italiano especializado en envejecimiento.
Uno de los principales temores a la hora de realizar quimioterapia es que ésta no sólo mata o frena la evolución de las células cancerígenas, sino que también resultan afectadas las células sanas del organismo. Por ello, al crear con el ayuno un mecanismo de resistencia que prolongue la supervivencia de las células sanas, también se está mejorando la calidad de vida y la longevidad del paciente.
Dado que las células cancerosas no poseen mecanismo de defensa, el ayuno permitiría aumentar las dosis de quimioterapia para combatir dichas células y, al mismo tiempo, no afectar las células sanas y reducir los efectos secundarios de la terapia, poco deseados entre las personas afectadas por cáncer.
Fuente: eluniversal.com
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