Hoy vamos a hablar sobre un problema muy común típico del verano, se trata de la deshidratación. Si no lo sabías nuestro cuerpo puede presentar diferentes tipos de deshidratación dependiendo de la etapa en la que nos encontremos, por eso, hoy queremos hablar sobre cada una de ellas, de forma que puedas darle a tu cuerpo lo que necesita y evitar problemas de salud, ¡presta mucha atención!
La buena hidratación es un aspecto fundamental para el funcionamiento de nuestro cuerpo, cuando perdemos mucho líquido sufrimos de un balance negativo que puede traer diferentes consecuencias. Una de ellas es la deshidratación isotónica, esto sucede cuando la pérdida de agua es similar a la de electrolitos. En este caso hay una disminución de volumen, pero sin cambios de composición, esto es común en aquellas personas que han sufrido de una gastroenteritis moderada o leve o que consumen de manera incorrecta diuréticos. También es frecuente en personas que sudan mucho en condiciones normales de temperatura y humedad.
En estos casos la solución está en reponer ambos simultáneamente, por tanto, recomendamos beber bebidas isotónicas o consumir sales de rehidratación oral. Para su prevención, no dudes en consumir bebidas con electrolítos si haz realizado un esfuerzo intenso y largo. Esto era lo que teníamos para compartir, no te pierdas la próxima nota en donde hablamos sobre otro tipo de deshidratación.