Seguramente a todos nos encantan los masajes, es un verdadero placer poder llegar a casa cuando tenemos los músculos cansados y disfrutar de un masaje que nos quite todas las tensiones. Los mismos tienen una gran cantidad de beneficios, en los últimos tiempos han evolucionado integrando nuevas técnicas que nos permiten tratar dolencias más complejas y aliviar dolores concretos.
Además, existen diferentes tipos de masajes, dependiendo de cuál sea nuestro objetivo. Están los fisiológicos-higiénicos, los cuales nos proporcionan mayor vigor o aliviar el cansancio, también los terapéuticos, los cuales optimizan la conciencia sensorial proporcionando relajación y bienestar. Por otro lado se encuentran los estéticos-higiénicos que relajan el estrés y devuelven al músculo su tono, los psicológicos-anímicos que regulan y alivian la tensión psico-física y por último, los sexuales que proporcionan mayor satisfacción sexual y estimulan el cuerpo para obtener mayor placer.
Debemos tener en cuenta que en la espalda tenemos una gran cantidad de terminaciones nerviosas, además de ser una de las zonas del cuerpo que más sufre. Por eso, no viene mal comenzar a insertarse en las técnicas de masaje. Por eso, a continuación te enseñamos a dar un buen masaje.
Primero que nada debes colocar a la persona boca abajo, sin ropa y totalmente estirada, recuerda además propiciar el ambiente para la relajación, bajando las luces y colocando música relajante. Además, debes tener las manos limpias y aplicar algún aceite para un mejor contacto cutáneo.
Para comenzar coloca las manos en los bordes de los omóplatos y realiza un masaje, arrastrando suavemente todos tus dedos, de arriba hacia abajo, firme y suavemente, sin realizar presión. A continuación nos movemos hacia la columna vertebral, el movimiento adecuado es como si estuvieras amasando los extremos de la columna lenta y profundamente.
Después vamos a desliza tus puños a los costados de la columna desde el cuello al sacro. Cuando llegues a los costados sube nuevamente en forma ondulante. Por último, deslizamos nuestras manos por el cuello, hombros y bajamos por los brazos hasta las manos.
Si sigues estos puntos podrás dar un buen masaje, ¿verdad que no es difícil? ¡Te animamos a intentarlo!