Los urólogos aseguran, y lo corroboran las estadísticas, que la impotencia sexual que puede comenzar a los 40 años, con frecuencia anticipa un infarto de corazón o derrame cerebral, que pueden llegar luego de 2 a 3 años.
Ander Astobieta, urólogo especialista en el tema, afirma que la vida sexual de un hombre va más allá del sexo, «estamos hablando de un trastorno que puede ser, en realidad, un síntoma centinela de una enfermedad mucho más grave».
Cuando sólo una vez se experimentan problemas sexuales se le debe restar importancia, pero cuando sucede al menos el 25% de las veces, ya es momento para acudir a un profesional de la salud. En ocasiones, el problema tiene su origen en alteraciones psicológicas, pero éstas son las menos, entre el 20% y el 30% de los casos. Las causas más abundantes son complicaciones de tipo físico que afectan el 70% u 80% de los hombres con edades de entre 40 y 70 años, especialmente a partir de los 50.
Según los expertos, hoy existen tres tipos diferentes de fármacos, todos ellos son seguros y efectivos y ayudan a resolver el 80% de los problemas de impotencia, siempre y cuando sus dosis vayan acompañadas de mínimas cantidades de sexo y deseo.
Uno de los peores enemigos de la erección es el tabaco, ya que estrecha las arterias y dificulta el flujo sanguíneo. Por lo tanto abandonar el cigarrillo y hacer una vida sana que incluya una dieta equilibrada y actividad física son la mejor forma de prevenir la disfunción eréctil.
Asimismo, la hipertensión, el colesterol, la diabetes y la edad son factores que predisponen a padecer el problema.
Fuente: yahoo.com