Investigadores canadienses observaron que los niños que son expuestos a la angustia materna desde el nacimiento hasta los 7 años de edad sufren un incremento del 25% en las probabilidades de padecer asma.
Dicha asociación no se encontró cuando la angustia materna era de menor duración, como es el caso de la depresión posparto.
Anita Kozyrskyj, autora del estudio, manifiesta que «el asma es una enfermedad multifactorial y hemos identificado un posible factor que podría estar relacionado con su desarrollo». «Lo bueno es que se trata de un factor de riesgo que se puede prevenir», agregó.
Según la American Academy of Allergy, Asthma and Immunology, alrededor de 20 millones de estadounidenses padecen asma, lo cual incluye a 9 millones de niños.
Actualmente, aún se desconoce la causa exacta del asma, pero los investigadores han encontrado múltiples factores que pueden influir en su desarrollo, como son los antecedentes familiares, la exposición al humo de segunda mano, entre otros desencadenantes ambientales.
El estudio realizado recientemente suma otro factor que podría involucrarse en el desarrollo del asma: la angustia materna.
Fuente: terra.com
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