Por lo general cuando pensamos en alimentos que contienen calcio los primeros que vienen a nuestra mente son los lácteos o alimentos que los contienen. Sin embargo, podemos encontrar este mineral en muchos otros, hoy vamos a contarte sobre otras posibles fuentes igual de accesibles, de esta forma podrás incluirlos en tu dieta.
Debemos tener en cuenta que el calcio cumple papeles fundamentales en nuestro cuerpo, especialmente para con la salud de los de dientes y huesos, y además contribuye a un equilibrio electrolítico y al funcionamiento de sistema nervioso y muscular. Por tanto, es bueno consumirlo de todas las fuentes posibles.
Una de las posibilidades son los pecados, tales como las sardinas, el bacalao seco y el caviar. La mejor opción de estos mencionados es la sardina en aceite, ya que poseen entre 300 y 400 mg de calcio por ciento.
Otra excelente opción es la soja, la misma contienen alrededor de 200 mg de calcio por cada 100 gramos de producto. La mima puede ayudarnos a cubrir la ingesta diaria de calcio, especialmente la harina, y no la leche de soja, ya que aunque sea difícil de creer, la misma no es una fuente demasiado rica en este mineral.
Tampoco podemos pasar por alto a los garbanzos, avellanas y almendras, estas últimas contienen entre 230 y 250 miligramos de calcio. Por último, algunos vegetales como el brócoli (120mg%), el berro (150mg%), el perejil (190mg%) y la albahaca (270m%).
Por tanto, si no te gusta el queso o la leche esto no significa que debes renunciar a este mineral, ¡te animamos a incluir estos alimentos a tu dieta!