La hidratación es un aspecto muy importante de los cuidados de nuestra salud, especialmente si solemos ejercitar. Hoy vamos a contarte cuán importante es, de forma que no la tomes por sentado y reconozcas su importancia. Debemos tener en cuenta que una mala hidratación trae como consecuencias un descenso del rendimiento físico y mental, provocando también que el corazón, los pulmones y el sistema circulatorio tengan que hacer un mayor esfuerzo.
Cuando ejercitamos nuestro cuerpo pierde mayor cantidad de líquidos y minerales, por lo que el riesgo de deshidratarnos es mayor. Lo correcto en estos casos es hidratarse antes, durante y después del mismo. Es importante que no esperes a tener sed para hacerlo, ya que en muchos casos las pérdidas de líquidos de nuestro cuerpo son imperceptibles. La mejor forma de recuperar los líquidos para el deportista es a través del agua, aunque las bebidas deportivas son de gran ayuda cuando estamos expuestos a intenso calor, ya que estas bebidas están compuestas por electrolitos e hidratos de carbono, además de incluir minerales como sodio, potasio y cloruro, por lo que ayudan a reponer rápidamente las sales que perdemos al sudar.
Por tanto, a la hora de ejercitar no debemos preocuparnos solamente por la dieta, sino también establecer un plan de hidratación, esto nos permitirá mejorar el rendimiento. Cuanto mayor sea la intensidad y la duración del ejercicio físico, más líquidos necesitaremos para rehidratarnos. Por último, debemos fijarnos que la bebida elegida contenga entre 30 y 60g de carbohidratos y entre 400 y 800 mg de minerales. Esto era lo que teníamos para compartir hoy, esperamos que esta información te sea de utilidad y puedas lograr grandes resultados, suerte!