Hay quienes por falta de tiempo no tienen otra que entrenar a la última hora del día, ya que durante el día no pueden hacerlo. Esto nos puede traer algunos problemas, como alterar el sueño. Hoy queremos hablar de cómo el entrenamiento de pesas o de resistencia, es decir, ejercicio intenso, nos trae algunos problemas si lo realizamos por la noche.
Vamos a comenzar hablando sobre las capacidades de recuperación de nuestro organismo, el mismo después de una sesión intensa tarta hasta cuatro horas en recuperarse por completo. Esto quiere incluye: volver a la frecuencia cardíaca normal, volver a recargar los depósitos energéticos musculares, recuperar el equilibrio hídrico y en general, volver a un estado de reposo que nos permita el correcto descanso. Por tanto, si hemos hecho una sesión intensa nuestro cuerpo queda en un estado acelerado y si nos acostamos enseguida no podremos descansar bien.
Ejercitar de esta forma hace que nos cueste más conciliar el sueño, nos despertamos muchas veces y tenemos la sensación de no haber dormido al levantarnos. Estos son síntomas de que nuestro cuerpo no pudo descansar como es debido. Por tanto, es importante racionalizar la intensidad con la que entrenamos, no siempre hacerlo hasta el tope por la noche, y alternar días fuertes con otros de descanso y otros más flojos.
Estos eran los consejos que teníamos para compartir, esperamos que los mismos te sean de gran utilidad y te permitan cuidar mejor de tu salud, ¡suerte!