La alimentación en los niños es un aspecto fundamental, ya que los mismos se encuentran en etapa de crecimiento, por tanto necesitan de todos los nutrientes posibles. Un alimento con el que es importante tener cuidado, aunque sea muy nutritivo, es el cereal. Esto se debe a que muchas veces los mismos tienen demasiadas calorías y conservantes artificiales que le sacan nutrientes.
Los cereales tienen muy buena fama y por lo general son consumidos como un alimento bueno y hasta dietético, sin embargo, en los casos de niños con elevado peso corporal es conveniente que no se consuman cereales azucarados, ni los que contiene alto niveles grasos o que sean salados. Los cereales normalmente aportan cada 100 grs entre unos 350 a 400 calorías, una cifra importante para niños con sobrepeso.
Si bien los cereales se obtiene de diferentes granos como el trigo, el maíz, arroz y de la mezcla de varias harinas, lo cual los hace muy nutritivos, también contienen agregados como: azúcar, chocolates o cacao, aditivos como edulcorantes, aceite vegetal, sal, extracto de malta, entre otras cosas, que no son del todo beneficiosos.
En el caso de los cereales que han sido fortificados con vitaminas del complejo B, vitaminas D y otros minerales, en especial el calcio y el hierro, también contienen huevo, leche en polvo, frutos secos, etc.
Los niños no distinguen estas diferencias, por tanto es deber de los padres cuidar de la alimentación de los mismos y asegurarnos de que se alimenten correctamente, eligiendo los cereales más sanos.