Hoy vamos a hablar de una de las consecuencias de consumir carne mal cocida. Se trata del síndrome urémico hemolítico (SUH), un trastorno que provoca insuficiencia renal, anemia y alteraciones neurológicas. ¿A qué se debe este síndrome? A la bacteria Escherichia Coli que se encuentra en la carne mal cocida.
El riesgo se presenta cuando la carne no está cocida en toda su superficie ni en su interior. Es muy común en comidas que llevan carne molida, tales como las hamburguesas.
Si la carne se cuece debidamente entonces la bacteria se destruye y no presenta ningún tipo de peligro, para que ésta muera la carne se debe cocinar a por lo menos 70 grados centígrados.
Es importante resaltar que la carne no es la única fuente de contagio del SUH. Otros alimentos que pudieran significar un riesgo para nuestra salud también, son los lácteos y los zumos de fruta no pasteurizados, también la verduras, frutas o agua contaminadas que hayan estado en contacto con las heces animales o humanas. Es por esto que es tan importante lavarse las manos antes de tocar alimentos.
El principal problema que causa el síndrome urémico hemolítico es la insuficiencia renal. Los riñones se vuelven incapaces de eliminar los residuos, concentran la orina y conservan los electrolitos. Esto hace que el paciente necesite de hemodiálisis para eliminar los elementos contaminantes de la sangre.
Otra de las complicaciones es la diarrea, presencia de sangre en las heces y un olor muy fuerte, irritabilidad, debilidad, disminución de la orina, piel amarilla, convulsiones, entre otros.
Debido a esto resulta fundamental que la carne esté bien cocida antes de consumirla, esta enfermedad es muy grave y no es difícil de prevenir. Con un poco de conciencia y cuidados en la cocina podemos evitarla.
Fuente: www.nutricion.pro
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