Si bien la mayor parte de los afectados por trastornos de la conducta alimentaria como anorexia o bulimia siguen siendo los adolescentes, se ha detectado un creciente aumento de casos en la mediana edad o entre adultos de alrededor de 40 años.
Muchas son las clínicas especializadas en trastornos de la alimentación que están registrando un aumento en el número de casos de mayor edad, tal es así que se estima que desde finales de 1990 se ha incrementado un 400% el número de pacientes de 40 años o más.
Se cree que gran parte de la responsabilidad de este aumento de anoréxicos y bulímicos adultos la tiene la constante obsesión por la delgadez y la presión social que se sufre al respecto.
No obstante, las personas que llegan a la consulta a los 40 años o más podrían sufrir el trastorno desde adolescentes y recurrir al médico para no transmitir los rasgos de la enfermedad a sus hijos.
Éste dato no debe ser considerado menor para los gobiernos e instituciones de salud, porque gran parte del tratamiento de los trastornos alimentarios son preparados para enfrentar un púber o adolescente, sin embargo los adultos también pueden ser víctimas de trastornos de la conducta alimenticia y necesitan de la ayuda de los profesionales, preparados para su abordaje.
Lo ideal es observar a cualquier persona con un ojo objetivo, de manera de poder detectar rasgos obsesivos propio de un trastorno alimenticio tanto en adolescentes como en adultos.
Fuente: diet-blog.com
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