Hoy vamos a hablar sobre un alimento muy utilizado para condimentar los platos, se trata del vinagre de manzana. Muchas veces a la hora de preparar nuestras recetas tomamos en cuenta los beneficios de las carnes y vegetales que incluimos y no la de los condimentos que utilizamos. Por eso, hoy vamos a contarte de cuánto puedes beneficiarte del vinagre de manzana.
El mismo es desde la antigüedad uno de los principales aderezos para ensaladas, ya que tiene un ligero sabor y un aroma muy delicado que le da un excelente toque a las comidas. Este no era solamente utilizado por esto, sino también por sus fantásticas propiedades y beneficios medicinales, siendo usado en el tratamiento y prevención de una gran diversidad de enfermedades.
En nuestros días podemos encontrar dos variedades del vinagre de manzana, el denominado como vinagre de vino (producto hecho por la fermentación alcohólica del zumo de uva), y el denominado como vinagre blanco (producido a partir de la fermentación acética del alcohol destilado, obtenido principalmente a través de la caña de azúcar).
Cualquiera de los dos posee propiedades destacables, entre las principales destacamos que nos ayuda a depurar los intestinos y mejorar la digestión, entre otros aspectos interesantes.
Por otro lado, también es muy bueno para depurar los riñones y es ideal para las dietas de adelgazamiento, gracias a que ayuda a eliminar las grasas (por su contenido en ácido málico), a la vez que es capaz de acelerar la combustión de las grasas.
Por último, destacamos que es muy bajo en calorías y entre los nutrientes que posee se destacan los minerales como el fósforo, calcio, fósforo, hierro y cobre, entre otros, y las vitaminas del grupo B como la vitamina B2, betacaroteno y ácido nicotínico.
Sin duda un alimento muy beneficioso que haremos bien en incluir en nuestra dieta, ¿no crees?