Dormir junto a los niños no es un hábito saludable, ya que perjudica la calidad del sueño nocturno tanto del niño como de los padres, pero quedarse con el niño hasta que éste logre dormirse, parece tener un efecto más negativo aún.
Según un estudio de la Universidad Saint Joseph de Filadelfia, los niños que duermen en una habitación separada duermen más, se despiertan menos durante la noche, tienen menos dificulta a la hora de dormirse y además, parecerían tener menos problemas de sueño.
El 11,8% de los padres entrevistados dijo compartir la cama con sus hijos, mientras que el 22% sólo compartía la habitación.
Investigaciones previas ya habían señalado que los niños que comparten cama o habitación con los padres tenían mayores problemas de sueño, sobre todo, se despiertan más veces durante las horas de sueño nocturno.
No obstante, es probable que el problema no sea la cama o habitación compartida, sino que los más pequeños que duermen sin sus padres, pueden volverse a dormir solos cuando se despiertan por la noche de forma natural, por eso, tienen menos problemas de sueño y más calidad del mismo durante la noche.
Es decir, los niños que duermen con sus padres reciben ayuda de éstos para volver a conciliar el sueño cuando se despiertan por la noche.
Así, dejar a los niños que duerman solos y que se duerman sin ayuda, puede ser un factor clave para beneficiar su salud, ya que al dormir mejor, también pueden prevenir muchas enfermedades y trastornos asociados al mal descanso nocturno.
Fuente: yahoo.com
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