Un problema muy común que en ocasiones solemos tener cuando hacemos pesas es que las manos se nos llenan de durezas. Este tipo de entrenamiento nos ayuda a tonificar y es una herramienta adecuada para hacer crecer las diferentes partes de nuestro cuerpo, aunque, el peso suele ser enemigo de nuestras manos. Por eso, hoy queremos darte una serie de consejos para evitar este problema, son fáciles de seguir y muy efectivos.
Queremos explicar primero que nada que las durezas tienen una razón de ser, se trata de un mecanismo que nuestro organismo tiene para proteger la piel de un roce o una fricción constante. Las durezas suelen aparecer en las almohadillas de las manos o en las de los dedos, ya que son las zonas que más rozan cuando agarramos las mancuernas. Si nuestro cuerpo no hiciera esto lo que sucedería es que la piel se rasgaría y se llenaría de heridas.
Por tanto, vemos que las durezas son en realidad importantes para cuidar de la salud de nuestra piel. Aunque, hay formas de mejorar esta situación, no necesariamente por estar bien entrenados y fuertes tengamos que tener necesariamente durezas y callosidades en el cuerpo. El consejo que te damos en este caso es que protejas la zona, utiliza guantes con refuerzo en estas partes o protectores que se colocan en las almohadillas, o en su defecto unas esponjas que nos ayudarán a eliminar parte de la fricción y de las durezas que aparecen con ella. Estos eran algunos de los consejos que teníamos para compartir, aunque no son los únicos, en la próxima nota te damos algunos más.