A medida que avanzamos en edad, nuestra alimentación comienza a cambiar, esto se debe a que nuestro cuerpo se ve modificado y por lo tanto tiene otras necesidades más específicas. Uno de los puntos que toda mujer debe tener en cuenta cuando ha pasado los 40 años, es que los niveles de estrógeno, una hormona femenina fundamental, comienzan a disminuir con la edad. Es por esta razón que debemos incorporar a nuestra dieta alimentos que nos ayuden a mantener estos niveles normales, hoy te contamos por qué es tan importante y las consecuencias de su falta.
El estrógeno es una hormona muy importante, su disminución está asociada con la menopausia y los síntomas de esta, como son los sofocos, sequedad vaginal o pérdida de la libido, estos problemas son debido a la disminución de estas hormonas.
Aunque no son las únicas consecuencias, el tener bajos niveles de estrógeno también puede conducir a pérdida de masa ósea y la osteoporosis, aumento de colesterol LDL (el colesterol “malo”) y disminución de HDL (el ”colesterol bueno “), presión arterial baja, pérdida de cabello, aumento de peso, dolor en las articulaciones y los músculos, fatiga, alteraciones gastrointestinales (como indigestión, flatulencia, distensión abdominal), aumento de las alergias, depresión, ansiedad, irritabilidad, insomnio, pérdida de memoria y dificultad para concentrarse .
Por esta razón, resulta fundamental adaptar la dieta a nuestras necesidades, cuidando que nunca nos falte el estrógeno. En la próxima nota te contamos qué alimentos son fuentes del mismo, ¡no te la pierdas!