La obesidad continúa en aumento y cada vez son más las personas que se presentan como candidatos a las cirugías bariátricas, así como las instituciones y profesionales que ofrecen este tipo de cirugías. Sin embargo, éstas implican un gran riesgo para la salud, son invasoras y requieren de un gran esfuerzo por parte del equipo profesional así como del paciente.
Un alternativa para tratar la obesidad sin cirugía, y totalmente reversible es el Balón Intragástrico, que ofrece Corporación Dermoestética y consiste en introducir un globo de silicona en el estómago por medio de un endoscopio.
Posteriormente, el globo se llena de suero fisiológico hasta alcanzar una dilatación suficiente que reduzca, por su tamaño, la capacidad del estómago produciendo así, saciedad precozmente.
El Balón Intragástrico puede permanecer en el estómago unos 6 meses, sin interferir en la vida del paciente, pero éste sentirá una notable disminución de su apetito y una pronta saciedad que conllevará una menor ingesta alimentaria y así, a un descenso de peso.
Para que lo poco que se come cubra las necesidades del paciente y éste no sufra carencias, siempre se brinda apoyo médico y técnico para que el tratamiento llegue a buen término sin interferir en la salud del paciente sino más bien, solucionando su principal enfermedad: la obesidad.
El mayor reto es educar al paciente y ayudarlo a modificar hábitos, para lo cual también se requiere mucho esfuerzo. Así, una vez retirado el balón, el individuo comerá menos y más saludable, para no recuperar el peso perdido sin pasar hambre y rápidamente gracias al Balón Intragástrico colocado en el estómago.
El Balón Intragástrico se retira de igual forma con que fue colocado y puede suceder a los 6 meses o cuando el médico lo indique.
Sólo se recomienda este tratamiento en personas que necesiten perder más de 10 Kg y que han fracasado en tratamientos previos tales como plan alimentario, fármacos u otros.
El Balón intragástrico realmente puede ser de gran ayuda para producir la pérdida de peso, pero se requiere de un gran hincapié en los hábitos, de lo contrario, lejos de ayudar perjudicará al individuo al favorecer la recuperación del peso perdido una vez retirado el balón del estómago.
Aún así, con buen apoyo y trabajo profesional-paciente, es posible sacar los más positivos resultados de esta técnica para tratar la obesidad, poco invasiva y con menos riesgo para el organismo.
Más información en: Corporación Dermoestética
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