Muchas veces cuando terminamos de practicar algún deporte nuestros músculos quedan muy adoloridos y tensos, aún si estiramos el dolor se mantiene. En estos casos un buen masaje no viene nada mal, por eso, hoy queremos contarte las diferentes variedades de masajes que tienes para después de ejercitar, ¡presta mucha atención!
Debemos tener en cuenta que al entrenar nuestros músculos sufren muchísimo, por lo que necesita que los mimen un poco. Existen una infinidad de técnicas diferentes para estos casos, todas ellas buscan acelerar la recuperación, y también pueden preparar nuestras fibras en caso de que masajeemos los músculos antes de entrenar.
En el caso de las piernas y la espalda, estas son las zonas que suelen trabajar más, es normal que sintamos molestias en estas zonas por causa de la sobrecarga y el exceso de entrenamiento. Masajearlas nos permite aliviar tensiones y mantener a nuestros músculos jóvenes por más tiempo. Entre los masajes más conocidos está la mesoterapia. En este masaje se utilizan las manos, los nudillos, los pies y los brazos para amasar nuestros músculos. Se trata de mejorar la circulación sanguínea de forma que se puedan eliminar los desechos acumulados que causan los dolores.
Otra excelente técnica es el drenaje linfático, consiste en descongestionar zonas específicas a través de movimientos suaves, rítmicos y superficiales. También tenemos el masaje terapéutico que se emplea cuando tenemos lesiones, el mismo se realiza con los pulgares o los índices y consiste es ahondar en las fibras que forman la parte afectada para conseguir que se suelten y regresen a su estado habitual.
Estos son los diferentes tipos de masajes que podemos emplear, ¿los conocías?