Sabemos que las frutas son alimentos fundamentales que no pueden faltar en nuestra alimentación diaria si queremos mantenernos saludables. Existe una gran variedad de frutas de la que podemos elegir, especialmente en verano, cada una de ellas con características especiales que las hacen muy recomendables. Hoy vamos a dedicarnos especialmente a las manzanas, una de las frutas más comunes.
La manzana tiene un sinnúmero de propiedades buenas, algunas más conocidas que otras. Un estudio reciente comprobó que las mismas mejoran el nivel de metabolismo de los lípidos y reducen la producción de moléculas inflamatorias relacionadas con el riesgo cardíaco.
Por otro lado, es un excelente alimento complementario para nuestra dieta, no solamente por sus pocas calorías, sino porque es una fruta que ayuda a perder peso y que nos ayuda a bajar nuestros niveles de colesterol. Aunque claro está, esto no significa que podemos llevar una dieta de comida chatarra y esperar que la manzana nos salve.
Por último, destacamos la practicidad de la manzana, una fruta sencilla de consumir ya que no necesitamos cortarla y que puede cargarse a cualquier lugar. Además, también puede aplicarse a muchas recetas diferentes, tanto platos principales como postres. Sin duda la manzana es una fruta muy beneficiosa, ¿no crees?