El titular parece algo extraño si analizamos las buenas características nutricionales de este tipo de alimentos.
Pero las frutas secas, no sólo son poseedoras de grasas buenas para el corazón, vitaminas y fibra, sino que también, contienen sustancias alergénicas que podrían ser las causantes del daño en el feto.
Según una investigación Holandesa, ingerir nueces, maní y otras frutas secas durante el embarazo, incrementa el riesgo de que el bebé desarrolle asma en un 50%.
El estudio evaluó a 4.000 mujeres embarazadas y se les interrogó acerca de sus hábitos alimentarios. Los bebés también fueron seguidos durante 8 meses luego del nacimiento.
Los resultados muestran un vínculo entre las madres que consumían a diario productos como mantequilla de maní y síntomas en los niños como silbido respiratorio, falta de aliento, asma diagnosticada y asma con uso de esteroides.
Los científicos aseguran que es necesario confirmar la relación hallada con futuras investigaciones, por lo tanto, no es recomendable eliminar por completo las frutas secas de la dieta durante el embarazo.
Aunque sí podría ser una buena forma de prevenir alergias y otras enfermedades respiratorias, reducir el consumo de maní o cacahuate, el cual se sabe, es un fuerte poseedor de sustancias alergénicas.
Más allá de las conclusiones, llevar una dieta variada y equilibrada significa incluir todo tipo de alimentos en sus cantidades adecuadas, y ésta puede ser la clave para que el embarazo y el desarrollo del bebé lleguen a buen término.
Fuente: bbc.co
En BlogNutrición: ¿En qué consiste una dieta saludable?
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