Dieta del té rojo

El té rojo tiene sus orígenes en el Oriente, donde también es conocido por el nombre de «Pu erh» o té de los emperadores. Una de sus principales atributos es que tiene una efectiva acción adelgazante y disminuye el colesterol.

Por otro lado, constituye un antibiótico natural, ya que refuerza el sistema inmunológico y tiene una acción sedante, combatiendo la ansiedad y el estrés. Además, es depurador , desintoxicante y favorece la digestión de los alimentos grasos.

Por lo general, el té rojo se utiliza para complementar dietas variada y bajas calorías que no duran más de 5 días. Gracias al té rojo, se llegan a perder hasta 3 kilos.

Sin embargo, el té rojo está contraindicado para niños, embarazadas, personas con alteraciones cardíacas, con casos de ulceras, nerviosismo o anemias.

En esta dieta están prohibidos los dulces, grasas, carnes, azúcar y frutas como la uva y el plátano. Por otro lado, sí están permitidas el resto de las frutas, las verduras, pastas, legumbres, arroz, huevos, pescado, y pan integral.

Un posible menú es el siguiente, se pueden hacer varias combinaciones con los alimentos nombrados anteriormente:

Desayuno: se tomará una infusión de té rojo con una pieza de fruta o un zumo y pan integral.

Comida: una ensalada o arroz con verduras, una tortilla o huevo escalfado, una pieza de fruta y una infusión de té rojo.

Merienda: una infusión de te rojo.

Cena: una sopa de verduras o ensalada y un pescado a la plancha con ensalada, una pieza de fruta y una infusión de té rojo.

Es importante que esta dieta no se realice por más de cinco días, ya que puede provocar estados carenciales de proteínas. Además, el té interfiere con el proceso de absorción de hierro.

Tomando las precauciones necesarias es una dieta sana y muy efectiva.

En BlogNutrición: La dieta de la Manzana.