La televisión parece ser el enemigo número uno de los niños en la actualidad, ya que si bien se lleva muy bien con ellos, produce daños que dejan secuelas para siempre en los pequeños.
Un reciente estudio que evaluó a 1300 niños a los 29 meses, a los 53 meses y a los 10 años de edad, comprobó que la televisión en los pequeños influye en la salud futura, ya que a más tele a los dos años, mayor es la posibilidad de que el niño tenga mal desempeño en la escuela y una mala salud al cumplir 10 años.
Concretamente, por cada hora adicional de exposición a la TV entre los pequeños, se reduce la participación escolar, se incrementa el acoso por parte de los compañeros, se lleva una vida más sedentaria, incrementa el consumo de comida chatarra y eventualmente, el índice de masa corporal.
Como podemos ver, la televisión desde muy pequeños condiciona el estilo de vida, la salud y el bienestar a futuro, afectando no sólo el rendimiento escolar y la salud mental, sino también, la dieta, la actividad física y la salud toda del organismo.
Un dato preocupante que se desprende de la investigación es que el 11% de los niños de 2 años y el 23% de los de 4 años, veían más del límite máximo de 2 horas diarias recomendado.
Son datos alarmantes que afectan a la primera infancia, un período crítico para el desarrollo cerebral y la formación de la conducta en donde un alto consumo de televisión puede conducir a dañar la salud futura del niño.
Muchos padres creemos que la televisión que se ve hoy no dañará a futuro, simplemente porque no creemos que pueda dejar secuelas y pensamos que sus influencias negativas desaparecen, pero esto no es así según el presente estudio, por eso, desde pequeños debemos limitar el consumo de televisión si queremos contribuir a un desarrollo saludable en los niños.
Fuente: bbc.co
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