Freír es una técnica de cocción muy utilizada alrededor del mundo, la misma deja los alimentos muy deliciosas, aunque, está lejos de ser la más sana. Por eso, hoy queremos compartir una serie de consejos para que puedas mejorar tus frituras y que no sean tan perjudiciales, de esta forma podrás cuidar mejor de tu cuerpo, ¡presta mucha atención!
La primera consideración a tener en cuenta es el aceite, este debe aguantar la temperatura del fuego. A nuestra disposición tenemos varios tipos de aceite distinguidos por su densidad. Destacamos por ejemplo el aceite de oliva por su alta densidad y resistencia a las altas temperaturas que se producen a la hora de freír, por tanto, libera menos toxinas perjudiciales para el cuerpo. Además, los ácidos grasos que nos aporta se mantendrán en mejores condiciones, por lo que el organismo los aprovechará mucho mejor, siendo más saludables.
Por otro lado, cuidado con la temperatura, debes evitar el uso de alimentos mojados que bajan la temperatura al sumergirlos en el aceite, así como sumergir de golpe alimentos congelados en el aceite. En estos casos debes freír de forma lenta evitando que se acumulen los alimentos. Para terminar, sumergir los alimentos en el aceite es una de las mejores maneras de freír. A diferencia de lo que la mayoría de nosotros piensa, un alimento sumergido en aceite absorbe mucha menos cantidad del mismo, con lo que el resultado de la fritura será mucho mejor y más saludable. Estos eran los consejos que teníamos para compartir hoy, ¡esperamos te sean de gran utilidad!