Con la llegada del frío uno de los órganos que más se ve afectado es la piel, es normal que la misma comience a mostrar signos de deterioramiento, se reseca y su aspecto se torna grisáceo. Para que esto no suceda hay algunas precauciones que debemos tener en cuenta, hoy te damos algunos consejos básicos que te ayudarán a cuidar de ella, ¡presta mucha atención!
Para evitar que la piel se reseque, aparezcan lesiones, irrite y torne desmejorada es importante que la hidratemos correctamente. Para lograr esto no solamente debemos beber suficiente agua y consumir alimentos que tengan mucho líquido, sino también recurrir a cremas nutritivas que refuerzan las barreras protectoras de la piel.
Por último, a la hora de bañarnos hay algunas precauciones que debemos considerar, por ejemplo, no usar el agua demasiado caliente, ya que elimina la grasa natural de la piel, lo mejor es que el agua esté tibia. Y en cuanto a la ropa, el algodón es la mejor opción ya que la piel transpira y evitamos irritaciones.
Estos eran los consejos que teníamos para darte, ¡esperamos te sean útiles y ayuden a cuidar de la salud de la piel!