A muy corta edad, ver un niño con algunos kilos de más no parece ser un problema de salud. Sin embargo, todos debemos conocer que un niño obeso es un potencial adulto obeso y que el exceso de grasa en el cuerpo genera efectos negativos, aun en los más pequeños.
A los tres años de edad ya se padecen las consecuencias del sobrepeso. A más temprada edad que lo esperado, los investigadores de la Universidad de Carolina del Norte encontraron incrementos de un marcador inflamatorio asociado a futuros problemas cardíacos y al desarrollo de diabetes tipo 2.
El 40% de los niños de entre 3 y 5 años que tiene obesidad, poseen elevados los niveles de proteína C reactiva, frente al 17% de los niños con peso saludable.
Dicha proteína se incrementa con la edad en quienes padecen sobrepeso, ya que en jóvenes de peso saludable, los niveles del marcador inflamatorio se mantienen, pero con sobrepeso, entre los 15 y 17 años de edad, el 85% de los jóvenes tiene altos niveles de proteína C reactiva.
La presencia de un marcador inflamatorio predice enfermedades, algo que debemos tener en cuenta porque demuestra que los kilos de más, ya inciden en la salud a muy corta edad y pueden dejar secuelas en el futuro si no se revierte la situación a tiempo.
El estudio no sirve para otra cosa que para abrir nuestros ojos y atender la salud de los niños aun cuando pensamos que son muy pequeños. Con sólo 3 años de edad, podemos hacer muchas cosas para que sus hábitos mejoren y así, evitemos el sobrepeso que conlleva a otras enfermedades.
Fuente: 20minutos.es
En BlogNutrición: Niveles preocupantes de obesidad infantil