El tabaquismo es una de las principales amenazas a la salud pública, ya que incrementa el riesgo de padecer múltiples enfermedades y acorta los años de vida de quienes padecen esta adicción.
Sin el cigarrillo, el cáncer de pulmón sería una enfermedad rara y se salvarían millones de vida anuales, porque el cigarrillo mata a una persona por cada 6 segundos que pasan, es decir, al año mueren más de 5 millones de personas debido al consumo de tabaco.
La lucha contra el tabaquismo se configura a nivel mundial y desde la Organización Mundial de la Salud, se ha celebrado que el 80% de los Estados han prohibido la venta de productos con tabaco a menores y han instaurado programas educativos para reducir su consumo.
Ya sea por vía de impuestos, advertencias sanitarias claras, legislaciones o prohibiciones en la publicidad del tabaco, la lucha contra el cigarrillo debe seguir y crecer a nivel mundial para salvar muchas vidas este año.
El tabaquismo es una epidemia que, a su vez, lleva a otras y predispone a enfermedades crónicas, sobre todo, cáncer y cardiovasculares, por eso, debemos comprender la magnitud del problema y luchar contra esta epidemia tal como hacemos con otras.
Una de cada 10 muertes que se producen en el mundo se deben al cigarrillo, por lo tanto, la mortalidad se reduciría notablemente si se logra disminuir el consumo de tabaco.
Fuente: eluniversal.com
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