Durante muchos años se han usado plantas como medicina y en la actualidad, muchas de ellas tienen propiedades curativas. Tal es así que a la menta se le atribuyen propiedades digestivas, energizantes, analgésicas y demás, algo que por mucho tiempo no se confirmaba científicamente.
Sin embargo, un reciente estudio llevado a cabo en Inglaterra confirma las propiedades contra el dolor de la menta brasileña, una de las tantas variedades existentes en el mundo.
La investigación fue realizada en ratones y presentada en el Simposio Internacional de Plantas Medicinales y Nutracéuticas.
La infusión original que recomiendan quienes trabajan con plantas medicinales se produce hirviendo las hojas secas de menta en agua durante 30 minutos y dejando que el líquido se enfríe antes de beberlo.
Después de la investigación, se encontró que cuando la menta se suministraba en cantidades similares a las que recetan los curanderos de Brasil, la medicina era tan efectiva para aliviar el dolor como un fármaco sintético semejante a la aspirina.
Su efectividad está probada como analgésico, pero ahora resta saber su efecto en humanos, así como descubrir cómo y porqué funciona de tal manera esta planta.
Este estudio puede dar origen a nuevos fármacos de origen natural en el futuro, con menos complicaciones y efectos secundarios y mas económicos, quizás.
Por el momento, sólo podemos continuar usando nuestras hojas de menta cada vez que cocinamos algún plato y disfrutar de sus beneficios para el organismo.
Fuente: diariosalud.net
