Tal como sucede con otras enfermedades y adicciones, el alcohol produce efectos diferentes según el sexo, ya que las mujeres tienen diferentes patrones de consumo, de composición corporal, diferencias metabólicas y farmacocinéticas que los hombres.
Por esta razón, las mujeres reciben más daño orgánico ante igual ingesta de alcohol que los varones, según lo indicaron expertos en Medicina Interna.
Concretamente, a bajas dosis de alcohol, las mujeres tienen menos beneficios en patologías cardíacas, mientras que ante consumos excesivos, son ellas las que presentan mayor grado de disfunción ventricular.
Asimismo, en patologías hepáticas por consumo de alcohol, las mujeres presentan un riesgo superior de desarrollar hepatitis alcohólica, fibrosis y cirrosis hepática con menores dosis acumuladas que los varones.
A igual consumo en mujeres y en hombres, son ellas las que con mayor frecuencia sufren un deterioro cognitivo y atrofia cortical por alcohol.
Todo ésto es los que hoy nos señala que el alcohol en más perjudicial para las mujeres que para los hombres, y se considera que un consumo de riesgo es para los hombres equivalente a beber 4 botellines de cerveza o vasos de vino, o a ingerir dos bebidas destiladas por día. En cambio, para las mujeres es un consumo de riesgo ingerir 2 botellines de cerveza o 2 vasos de vino, o una bebida destilada.
Como siempre decimos, exceder las recomendaciones de ingesta de alcohol, puede ser un factor que perjudique gravemente nuestra salud. Por ello, es indispensable, autocontrolar su consumo o de lo contrario, evitar su inclusión en la dieta diaria.
Fuente: abc.es
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